Soporte invisible

10 KEJ – 04.06.2021
Para sanar hay que desintegrar los patrones de fondo que generan nuestras enfermedades. Una dolencia física, mental o circunstancial tiene siempre una base estructural sobre la que se sostiene. Esa base está compuesta de energía e información que se procesa dentro de nosotros mismos. Matar el síntoma no cambia su “soporte invisible”.
Así como el ser humano es integral, la enfermedad que le mina también lo es. Una dolencia, la locura o un mal social no surge de la nada. Tiene su parte visible, el síntoma, pero también sus componentes sutiles y ocultos. Puedes arrancar un tumor o encerrar de por vida a un criminal pero si esto no se complementa con una transformación interior profunda el mal individual o colectivo volverá. Ya sea de la misma forma o tomando otra apariencia.